Conexión...
Jaime Padilla
Maestro en Educación. Académico de tiempo completo en el Instituto UNAO, especialista en procesos de formación docente, metodologías para la planeación didáctica, diseño e innovación curricular. Aficionado en escribir temas que permitan reflexionar acerca de la complejidad del ser humano y la vida en general.
Erich Fromm escribió “el hombre sólo es él mismo cuando se expresa, cuando da salida a sus potencias innatas. Cuando eso no ocurre, cuando sólo “posee” y utiliza, en lugar de “ser”, entonces decae, se vuelve cosa, su vida pierde sentido, se transforma en sufrimiento”.
En una cotidianidad donde vamos a prisa, en donde el tiempo es limitado, todo urge, la reactividad está a flor de piel, la queja está presente y la des-organización hace su parte, se complica conectar con lo que siempre es importante, con lo básico.
Mientras escribía este texto, me compartieron este mensaje “sabes estoy buscando trabajo ya sea de aseo no importa solo quiero chamba, si sabes de algo dime sale”. Un porcentaje sorprendente de personas viven en la necesidad, no me mal entiendan, todos tenemos necesidades, pero hay un extremo de vivir solo para soportar las necesidades de subsistencia, esto trae consigo una preocupación constante, agobio, ansiedad. Vivir en estas condiciones, ha implicado que nuestros deseos más profundos, más íntimos se vayan desvaneciendo, inclusive desaparezcan, nos vamos anulando.
No es de sorprenderse, pues el sistema en el que estamos inmersos, está diseñado precisamente para evitar que conectemos con nuestra esencia, nuestra naturaleza, nos vamos saturando de una cotidianidad que nos mantiene ocupados de forma robotizada, no reflexiva, sino todo lo contrario.
Cuando Fromm expresa “el hombre sólo es él mismo cuando se expresa, cuando da salida a sus potencias innatas” se refiere, en un primer momento a descubrir nuestras cualidades como persona y la expresión (desarrollo) de las mismas, nos permitirá Ser y no solo subsistir en esta realidad.